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Jueves 1 de agosto, 2024
Las alarmantes cifras detallaron que 25 millones de argentinos son pobres, cerca de 8 millones están en estado de extrema pobreza y la inseguridad alimentaria alcanza al 32,2% de los niños, niñas y adolescentes.
El Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (UCA) difundió un informe en donde se afirma que la pobreza escaló desde el 44,7% en el tercer trimestre del 2023 al 55,5% en el primer trimestre de este año. El indicador de la “pobreza” se determina por el valor de la canasta básica alimentaria, y ya alcanza a 24.9 millones de residentes en áreas urbanas en el país, mientras que unos 7.8 millones de personas están sumergidos en la pobreza extrema o indigencia, de acuerdo con el documento.
En este contexto, con el foco puesto en la población infantil, la Asociación Civil Franciscana Pata Pila continúa luchando contra la desnutrición a través de la atención integral de la salud en distintos puntos de Argentina: “Nuestro enfoque incluye prevención, seguimiento, diagnóstico y tratamiento nutricional para recuperar a niños de 0 a 5 años y formar a sus madres como principales agentes de salud”, afirmó Diego Bustamante, fundador de Pata Pila, y continuó: "Creemos en un mundo donde cada niño tenga una nutrición adecuada para desarrollarse saludablemente y donde cada persona pueda ejercer plenamente sus derechos y desplegar al máximo sus capacidades", enfatizó.
El estudio también reveló que la inseguridad alimentaria alcanza al 32,2% de los niños, niñas y adolescentes de zonas urbanas. La inseguridad alimentaria ocurre cuando las personas no tienen acceso regular y permanente a alimentos en cantidad y calidad suficientes para sobrevivir, según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Esto implica que una persona en esta situación enfrenta incertidumbre sobre cuándo, cómo y cuánto comerá en su próxima comida, lo que pone en riesgo su nutrición, salud y bienestar.
El reciente estudio de la UCA también destacó que la tasa de mortalidad infantil de menores de 1 y 5 años ha mejorado desde el 2005, aunque existe una considerable variabilidad entre las provincias. Los datos sugieren que los altos niveles de mortalidad infantil tienden a correlacionarse con altos niveles de indigencia monetaria.
En un país donde la pobreza y la inseguridad alimentaria se han convertido en una cruda realidad para millones de personas, el trabajo de organizaciones como Pata Pila se torna más esencial que nunca.Creemos fundamental el apoyo a este tipo de iniciativas porque cada niño bien nutrido es un paso hacia un país más justo y con mayor equidad.
Desde Pata Pila, reiteramos nuestro compromiso y llamamos a toda la sociedad a unirse a esta lucha contra la desnutrición infantil que está teniendo lugar en Salta, Mendoza, Entre Ríos y Buenos Aires dónde nuestro equipo trabaja incansablemente en territorio.
Si te interesa sumar tu apoyo, doná ahora haciendo click en donar:
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